Saturday, August 20, 2011

sociedades literarias...

estoy mareado, dijo el sabio... siento que es señal de la partida... hablamos medio en serio, medio en broma... luego dijo que cada día se sentía débil... dentro de mí sentía que era el momento de colgar, no decirle mas nada y pensar en el resto de mi vida... recordé verle joven, sentado en una banca junto a su esposa, con unos lentes de marco negro, con cabellos cortos y rubios, con una mano inquisidora, apuntando al infinito dentro de su vida... le vi serio, tal como se beben la vida aquellos que han dejado de soñar por vivir en verdad...
el tiempo no hace caso a las palabras y los libros no cesan de editarse... escucho nombres y títulos de libros, escucho sus precios y el mal olor de la mentira... me dejo llevar por este río de ilusiones y aspiro por algo mas, algo así como el sabio al otro lado del teléfono, pensando en sus mareos, en su vida que se apaga, en tantas mas cosas como los alientos que disfruta...
el temor por el otro lado de la colina nos lleva a escribir acerca de lo que sea.... y uno crea poemas sin parar, si saber hacia dónde se irán... cuelgo el teléfono y me pongo a meditar por el resto de mi vida mientras veo una luz en mi cuarto, señal que son mas de la media noche y las almas visitan a los muertos o soñadores...
estoy mareado dijo el poeta mientras empezaba a escribir un poema...

Friday, August 05, 2011

el brillo de la sombra

... tenía poco que hacer... un pañuelo estaba en mi bolsillo izquierdo, lo saqué y pude ver una mancha semejante a un rostro... sacudí el pañuelo y la mancha se volvió en una manada se bichos... sentí asco de mi cuerpo, algo así como ganas de morir miles de veces... la gente seguía pasando por mi lado y mi mano aún estaba abierta, esperando algo así como dinero para comer... una sombra se me acercó tanto que sentí que estaba en un cuarto oscuro... qué desea de mí, pregunté... ¿tienes un pañuelo?, dijo... saqué el pañuelo del bolsillo y se lo di... la sombra lo cogió y se lo puso en su saco negro, así como todo él... le vi alejarse y vi que mi mano no estaba mas en alto, estaba cerrada, como cogiendo algo... abrí la mano y vi una mancha dorada... sacudí la mano y de ella volaron bichos dorados, semejantes a pequeños soles... no sé por qué sentí fuerzas para levantarme y vivir mas, diferente, algo así como dar sin esperar mas nada... di un paso, luego otro, otro, y en cada paso que daba, dejaba una estela dorada y de cada huella volaban bichos como soles, estrellas o algo hermoso y sin palabras... corrí y no me detuve hasta llegar a la luz de un día dorado así como la estela que dejaba en mis pasos... le pregunté al sol qué era eso... son tus pasos, tus mas bellos pasos y brillan porque has nacido para brillar... el sol siguió brillando mientras mi vida brillaba por cada paso que daba, era así...